CON EL PAN BAJO EL BRAZO

jueves, 3 de abril de 2008


Hace algunos años atrás; en un canal de televisión local, (América Televisión, sino me equivoco) y cuando aún se veía el canal cinco de Televisión Nacional de Chile, gracias a unas antenas enormes colocadas en cada uno de los techos de nuestros hogares; se veía una vieja serie de los años setenta que se llamaba “Ocho Son Suficientes” cuyo “pater familis” o jefe de familia era un viejito pelado que tenía muchos hijos y que por ello tenía muchos problemas, gracias al comportamiento de cada uno de ellos y las vicisitudes propias de una familia numerosa. Mi vida actual me ha hecho recordar esa serie, pues hace algunos días atrás mientras escribía un relato dentro de este blogg, bromeaba respecto a la numerosidad de mi familia, pues con las cinco mascotas que tenemos, y a quienes considero parte integrante de la misma, habíamos logrado ser los ocho componentes.

El último en llegar se llama “Chester”, y como indiqué en el relato, cada uno tiene su propia personalidad, este me salio bastante mordelón, renegón, juguetón y contestón, pues nunca se queda tranquilo cuando lo reprenden, pero es tan dulce que se le malcría y se le perdona todo, aun cuando tengo que limpiar enormes cantidades de “popo” para no decir “KK”, de la sala o el pasadizo, espero que pronto aprenda a ir al baño, aun es muy cachorrito. Debo recordar que Chester llegó a nuestras vidas cuando Amparo (My Wife) estaba pasando por un serio problema de inamovilidad por el yeso de su pierna, hecho que felizmente ya pasó. Lo que hizo que mi vida volviera casi a la normalidad. Ya éramos felices, pero un hecho lleno de felicidad estaba a punto de suceder, mi vida estaba a punto de dar un giro no de 180º grados, pero al menos una pequeña vuelta que podría cambiar la historia de mi familia.

Era 31 de Marzo del 2008, aquel día salió el sol muy temprano y radiante alumbró el balcón de mi casa, me desperté temprano, había recibido información que al parecer mi Resolución como Procurador Adjunto, ya se había emitido, pero nada a ciencia cierta, sin embargo, era mejor llegar temprano a la oficina, además mi Jefa estaría allí. Amparo se había sentido un poco mal ese día, pese a ello, se levantó, alistó a Samuel y preparó el desayuno para todos; desayunamos temprano, previa ducha de agua helada, me termine de vestir y espere a Amparo, salimos juntos en un mismo taxi, ella para dejar a Samuelito al Jardín “Niño Jesús” y yo rumbo a la Procuraduría. Ya en el desayuno, me había dicho que se sentía muy mal, y que tenía nauseas, así que me manifestó su interés por hacerse un examen de sangre pues quería saber si no estaba embarazada, ya que su pie había mejorado lo suficiente como para reiniciar su rutina en el Gimnasio, pero no quería hacerlo sin estar segura que no estaba embarazada, pues quería iniciar una dieta estricta ya que la vida sedentaria; (mientras tenía el yeso); la había hecho subir unos kilitos de más y quería reducirlos a como diera lugar; Así que me volvió a tocar el tema durante el desayuno, asentí que se lo hiciera, pero que vaya sin muchas esperanzas, pues ya antes habíamos tenido algunos retrasos, que no habían sido un embarazo. Ella respondió tranquila que solo quería descartar el embarazo para iniciar el gimnasio nomás, pero a kilómetros se notaba su interés por que el resultado fuese positivo. Nos despedimos cuando el taxi dobló la esquina de Blondell con la calle Cuzco.

Al llegar mi mente se volvió hacia el trabajo, y volvía recordar que me habían propuesto como Procurador Público Regional Adjunto y aún no salía la resolución, y en el estado en que estaban las cosas era muy probable que esta no saliera, pese a que muchas personas me aseguraban que si, solo que ya no era crédulo, pues hacía dos meses que me aseguraban lo mismo. Mientras divagaba en mis pensamientos y ordenaba unos papeles, llegó un amigo que trabajó en la Procuraduría, y me contó que lo ascenderían, tuve una envidia sana, y lo felicite por ello, pero inmediatamente pensé en que dejaba un lugar que alguien debía llenar, y quien mejor que yo, pensé. Pero no podía hablar con él, no era el momento, pero solazmente se lo comente, y me contestó – Yo creo que tu hubieras sido la persona necesaria para el cargo, pero ya estas designado como Procurador Adjunto -; -pero, ¡no me notifican ninguna resolución aún! – fue mi respuesta también inmediata. A lo que respondió con soltura y convicción - pero va a salir -. Su seguridad me hizo pensar que tal vez, sería verdad. Solo me quedaba esperar. Así que continuamos una improvisada reunión con todos los demás compañeros de trabajo, contándole las nuevas anécdotas que se había perdido desde que ya no trabajaba con nosotros.

Se le extraña a “Luchin Lin Lin” como cariñosamente lo llamábamos con cierto tono burlesco, haciendo alusión a “Paolin lin lin” personaje creado por el humorista Carlos Álvarez en su programa Cómico de televisión, en el que se burla del polémico jugador del Fútbol peruano Paolo Guerrero, ya han pasado algunos meses de su ausencia y sus ocurrencias y sus palabras sobrias a veces, eran el principal motivo de su recuerdo, pero aquí estaba por unos minutos, y por esos instantes éramos nuevamente compañeros de trabajo, y otra vez nos reíamos a carcajadas, burlándonos de nosotros mismos, haciendo sorna de nuestros errores y recordando anécdotas de trabajo. Es un buen muchacho Luchin; algún día estaremos trabajando juntos de nuevo, o tal vez no, pero no dejaremos de ser los amigos y compañeros de trabajo que fuimos durante el año 2007 en la Procuraduría.

En fin, mientras nos reíamos en aquella improvisada reunión, llegó Amparo (mi esposa) vestida con ropa deportiva, una pantaloneta ploma de franja turquesa y un polo blanco y turquesa que hacía juego, el cabello recogido en una cola de caballo y zapatillas blancas como su sonrisa, que hacia juego con el tono de su tez sonrojada, irrumpió en la reunión y saludando brevemente se aproximo hacia mi, con un sobre en la mano que me entregó haciéndose la intrigante. Abrí el sobre, como era de esperar era de un laboratorio, dentro de él los resultados del examen de sangre que se acababa de tomar para saber si estaba embarazada, al leer mi vista se nublo casi por completo, alcanzando a ver solo una palabra en letras rojas y grandes: “POSITIVO”; me sentí desorientado, no sabia que decir, mi nerviosismo era evidente, estaba mezclada mi alegría y mi preocupación, hacia tiempo que teníamos pensado darle un hermana a Samuel, pero no es lo mismo proyectar, que tener. Nuestra historia había cambiado en ese instante; Amparo estaba feliz, y por supuesto yo también, al terminar de leer fugazmente el documento, solo atine a darle vuelta y mostrárselo a todos, no dije una sola palabra, luego todos me daban la mano, un beso y un abrazo, felicitándome por la buena nueva. Ahora solo falta la Resolución de adjunto me decían.

Salí con Amparo, a petición de ella, y empezamos a llamara todos, ella quería que todos se enteren, así que fuimos llamando a mi tío Rolfi, mi madre, mi tía Beatriz, su mamá, Luzmila, etc. Llamamos a todos o casi todos, menos a mi Padre. Todos estuvieron felices por nosotros, incluso mi suegra celebro la noticia, creo que fue la primera en enterarse, incluso antes que yo, pero luego de la euforia del momento, y luego que Amparo se fuera, empecé a reflexionar en el relato que había escrito hacía solo unos días, ¿ocho son suficientes?, nuestra familia ya había llegado a ocho, y no sabia como responder a esa pregunta, nuevamente venía a mi cabeza la pelada del viejito buena gente ese de la serie de los años setenta por América televisión o televisión nacional de Chile, que tenía tantos hijos, yo solo tengo un hijo humano, pero tengo cinco hijos perrunos a quienes adoro. Ahora estaba confirmado, mi familia había llegado a NUEVE (09), en estos días Amparo a reservado una cita en ESSALUD, para iniciar sus chequeos, seguramente nos indicarán como en nuestro primer embarazo una ecografía INTRAVAGINAL o TRANSVAGINAL, no se exactamente su denominación y entonces sabremos si llegamos solo a nueve, o tal vez, …solo tal vez…, lleguemos a DIEZ. ¿Se imaginan?... Yó si.

En la tarde, o más bien entrada la noche, me llamaron del Gobierno Regional, querían que vaya a la sede para notificarme una resolución, por fin luego de la larga espera, se había emitido la resolución que me designaba como Procurador Publico Regional Adjunto, lo que era una buena noticia ¿no?, con ello se completo ese día, después de ello llegue a mi casa, le mostré la resolución a mi Padre y mi Madre, quienes me fueron a recoger de la sede del Gobierno Regional, pues mi carro sigue malogrado, y luego se la mostré a mi esposa, quien no se alegró, pues al parecer estaba más segura que yo mismo de que saldría, me dio un beso en la cama y me dijo, - duerme temprano que mañana te espera un largo día, y tienes que ir muy temprano a firmar por primera vez tu tarjeta de asistencia – Aporte importante, pues ahora entro mas temprano. ¿Será cierto eso de que los bebes llegan con un pan bajo el brazo?, ésta vez él o la bebe llego con una resolución bajo el brazo, que bien ¿no?.